Como parte de un trabajo emprendido en conjunto entre la Coordinación de Derechos Humanos y el Archivo Histórico de la UNSL, en la mañana del jueves 29 de agosto, los equipos de trabajo de ambos espacios comenzaron la tarea de búsqueda y preservación de legajos de las víctimas de terrorismo de Estado en el Centro Universitario Villa Mercedes, durante la última dictadura, 1976-1983.
Distintos tipos de archivos, carpetas, informes y resoluciones de la Facultad en esa época forman parte del material que se investiga. Es una tarea ardua y compleja, ya que no todos los legajos se encuentran en condiciones. El objetivo es rescatarlos, preservarlos y digitalizarlos.
“El propósito es entregar esos legajos a todos aquellos componentes de diferentes claustros de nuestra comunidad que hayan sido víctimas del terrorismo de estado en la dictadura en nuestra institución”, explicó la coordinadora del espacio de Derechos Humanos de la UNSL, Esp. Ana María Garraza. “Pero significa algo más que eso. Es una reparación hacia las familias víctimas y a la sociedad, como también un claro mensaje en un momento donde tenemos un gobierno que niega o directamente reivindica el terrorismo”, aclaró.
Docentes, estudiantes, Nodocentes y representantes gremiales vinieron al Centro Universitario para comenzar con la tarea; coordinar acciones con quienes desde Villa Mercedes vienen trabajando en la recuperación de archivos, el Magister Richard Miranda y el Esp. Esteban Arias.
Arias destacó que el proceso de recuperación de la documentación es fundamental para preservar registros históricos importantes. “Con Richard Miranda hemos extraído documentos ubicados en el antiguo edificio de Avenida 25 de Mayo, muchos de los cuales estaban en un estado de deterioro avanzado. La importancia de este trabajo, radica en evitar que el paso del tiempo y las condiciones inadecuadas de almacenamiento dañen irreparablemente estos documentos. El equipo de la UNSL, altamente competente, ha sido clave para asegurar que este valioso material histórico no se pierda. Desde ya agradecemos a la Decana de la FCEJS, Roxanna Camiletti, y el Decano de la FICA, Sergio Ribotta, por toda la colaboracion que nos brindaron para poder acceder al edificio de 25 de Mayo y lograr extraer la documentación”.
Por su parte, la coordinadora del Archivo Histórico y Documental de la UNSL, Dra. Sonia Riveros, comento que “Esta búsqueda es posible gracias a la recuperación, que se hizo el año pasado del ‘Nunca Más’ en la universidad, por el cual tenemos acceso a la lista de estudiantes y docentes que fueron dados de baja y expulsados durante la intervención en la dictadura. También los nombres de Vila Mercedes para buscar sus legajos e iniciar este proceso”, comentó.
“En esta primera etapa se hace búsqueda, clasificación y limpieza de documentos que se encontraban dispersos. Por eso, vinimos con el equipo para iniciar estas tareas y así poder completar las etapas de este proyecto”, señaló.
El proyecto se hace en el marco de una propuesta presentada por Garraza y Riveros, y aprobada por una ordenanza del Consejo Superior de la UNSL. Y a partir de una política de Memoria que se implementa en todas las universidades del país.
LA MEMORIA Y LOS DISCURSOS
La coordinadora del espacio de Derechos Humanos indicó que estas iniciativas son importantes, además, ante un contexto actual “donde los discursos y acciones oficiales tienden a reivindicar el terrorismo del Estado y el genocidio”. Por eso, sostuvo que la decisión de la universidad “adquiere una significación especial porque retoma la memoria histórica, que es oral pero también escrita. Y en las instituciones, la documentación que aprueba, convalida lo que sucedió se encuentra a través de los archivos que hoy comenzamos a clasificar”.
De igual manera, Sonia Riveros remarcó que esta tarea de recuperación y restitución de legajos “nos llena de orgullo y satisfacción porque nos da la posibilidad de visibilizar lo que pasó en esa etapa tan dolorosa”.
Dante Bodo y Luis María Frum, docentes universitarios asesinados durante la dictadura; y Adolfo Pérez, estudiante, desaparecido, son los casos más recordados en el centro Universitario Villa Mercedes. La investigación y el rescate de legajos puede ampliar la historia: “Lo más probable es que encontremos otras resoluciones y que aparezcan víctimas que hayan sufrido persecuciones dentro de la institución o que fueron detenidas en otras provincias… Esto también forma parte de la importancia de esta tarea”, reveló Garraza.
Por eso, afirmó que la cuestión “desaparecidos” es una etapa no cerrada “y no se cerrará nunca” mientras “no se rompa el pacto de silencio que, aún siendo juzgados los responsables nunca se rompió. Entonces, cuando se empieza discutir una cifra, no es un número cerrado porque pueden ser muchos más. En este tipo de actividades, más allá de esos nombres emblemáticos, pueden van a aparecer otros casos y vamos a tener que ir aumentando ese número…”.
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