“PRIMERO MERCEDES, SEGUNDO MERCEDES, TERCERO MERCEDES”

Exhibiendo una notable uniformidad en el discurso oficial (antes lo había dicho el Secretario de Gobierno Germán Sepúlveda), el Administrador General de Obras Sanitarias, Arq. Sebastián Estrada, refuerza la idea instalada por el intendente Maximiliano Frontera, de priorizar antes que nada lo local.

Yendo al tema específico de la empresa que conduce, el funcionario admite que los villamercedinos, o al menos buena parte de la población, no conoce o valora en su exacta dimensión el servicio que presta la empresa encargada de distribuir el agua potable que se consume diariamente en los hogares.

En este sentido, accede a explicar cómo funciona el sistema de distribución, desde que se capta en el río Quinto, a través de bombas, la decantación de las materias sólidas del agua, el filtrado, la cloración para hacerla potable y la acumulación en grandes cisternas, a través de las cuales luego se conduce por acueductos a los tanques y finalmente se reparte a la población.

“Es un servicio que funciona las 24 horas durante los 365 días del año, para asegurar la calidad de este servicio fundamental que recibe la población y vital para la subsistencia”, afirma.

Por otro lado, también pone en valor el trabajo y la especialización que requiere acometer los trabajos de reparación cuando sucede alguna rotura en las cañerías, que en general tienen una antigüedad superior a los 50 años.

“La contracara es la baja de la recaudación, que dificulta mantener todo el servicio”, se lamenta, al reconocer que actualmente paga la tasa menos del 30% de la población.

Hacia el final, Estrada también se refirió a cómo ha evolucionado la relación entre diferentes sectores internos, como el gremio, con quienes la gestión municipal tuvo al principio muchos enfrentamientos. “Creo que no se habían entendido algunos criterios”, minimiza. “Algunos decían que no iban a trabajar para Frontera, lo cual era un concepto equivocado. No se trataba de trabajar para Frontera o Merlo, sino por la ciudad. Es decir, despolitizar la gestión”.

“El título se lo voy a robar a Maximiliano Frontera: primero Villa Mercedes, segundo Villa Mercedes y tercero Villa Mercedes”, se despide.

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