26 julio, 2024

PREOCUPA LA SEGUIDILLA DE ASALTOS EN UN BARRIO PRIVADO DE VILLA MERCEDES

“Los robos comenzaron a principios de año y nunca se ha podido esclarecer nada, pero la semana pasada ya fue demasiado y los vecinos se están organizando y salen armados a tratar de agarrar a los responsables. Esto va a terminar mal, acordate”.

El relato en estricto off de reccord pertenece a un inquilino del Club de Campo Los Caldenes de Villa Mercedes, quien comentó a Apuntes de San Luis “la bronca que sienten todos los habitantes de este exclusivo complejo, cerrado y con seguridad”, que viene siendo objeto de permanentes asaltos.

“Los vecinos están cansados y explotaron el pasado jueves, cuando sonó una alarma poco después de las 20:30 y se enteraron que habían robado en dos viviendas. Un montón de hombres y mujeres salieron a las calles internas, con linternas, algunos con armas otros con palos y fierros, a patrullar los alrededores. Al parecer alcanzaron a ver a uno cuando bajaba de un techo, pero como estaba muy oscuro se pudo escapar, dicen por la cancha de golf”.

Con expensas cercanas a los $50.000, “exigen a la administración del complejo mayor seguridad, pero los de la garita les dicen que tienen poco personal y que básicamente ellos aseguran la entrada y salida, pero no pueden colocar gente que recorra el barrio”.

Entre los propietarios e inquilinos han comenzado a sospechar que “los autores podrían ser personas que viven en el mismo barrio privado”. Abona esta sospecha el conocimiento que tienen que “de un tiempo a esta parte ha venido gente nueva que no compró ni está construyendo, sino que alquilan, que no se integran al barrio y tampoco conocemos”. En todos los casos, lo que se roban es dinero, joyas y computadores portátiles, “algo fácil de trasladar, nada pesado”.

Algunos están proponiendo que antes de permitir que lleguen nuevos vecinos, se implemente el pedido de presentación del “certificado de buena conducta”, para asegurarse que no tengan antecedentes policiales, aunque saben que legalmente eso seria altamente cuestionable.

Lo cierto es que en los últimos meses una gran cantidad de propietarios ha comenzado a reforzar la seguridad de sus casas e incluso colocaron alarma y cámaras de videovigilancia, pero saben que “sirven muy poco, porque siempre tienen capuchas y no se puede ver el rostro. Además, como los hechos suceden de noche se escapan fácilmente y las cámaras no alcanzan a captar casi nada”.

Consultados si ha habido intervención policial, reconoció que el jueves por la noche llegó la policía y un fiscal. “Charlamos con ellos, les contamos todo, recorrieron el barrio y se fueron. Es muy difícil cargar en ellos la responsabilidad, imaginate que si hay un robo hasta que los llamás y vienen del centro pasa mínimo media hora. A esa altura los ladrones ya se fueron por el campo y no los encontrás más. Salvo que sean de adentro o estén escondidos en una casa o en alguna obra en construcción”.

“Acordate, si no se toman medidas, esto va a terminar mal. Cualquiera que tiene un arma va a salir y le va a meter un tiro al que encuentre. El problema es si se equivoca y le dispara a un vecino que por ahí anda patrullando. Esto no da para más”, concluyó la fuente de Apuntes de San Luis.

(Aclaración: la policía tendría en su poder varias denuncias, pero como solo informa de los casos que se esclarecen, se desconoce si cuenta con alguna pista o ha tenido algún avance en las investigaciones).

About Author