PRISIÓN PREVENTIVA POR 30 DÍAS PARA UN IMPUTADO POR HURTO

El hecho ocurrió el pasado 1 de septiembre en Villa Mercedes. Al día siguiente, en una audiencia de formulación de cargos se le imputó a un hombre el delito de robo simple. La defensa en ese momento solicitó una prórroga de detención de cinco días, que fue concedida por la magistrada.

Este jueves, y al vencerse la prórroga de detención, se desarrolló una nueva audiencia donde la defensa expresó, entre otras cuestiones que en los videos de las cámaras de vigilancia, no se visualizan los hechos con claridad. Asimismo, explicó que no se encuentra verificada la existencia de fuerza física o daño en el vehículo.

El Dr. Hernán Herrera solicitó el cambio de la calificación legal a hurto simple en grado de tentativa y que la medida de coerción sea de un plazo razonable teniendo en cuenta, entre otras cosas, la escala penal mínima del delito.

La Dra. Gisela Milstein –Fiscal Adjunta- informó acerca de la evidencia y de un informe donde da cuenta de la fuerza aplicada. Solicitó que se mantenga la calificación legal del imputado por robo simple y que incorpore la tentativa.

Pidió que la medida de coerción sea la prisión preventiva por 90 días ya que existe prueba pendiente de producción y riesgo de entorpecimiento al proceso judicial atento a que el hombre está cumpliendo una condena en suspenso por otro delito.

La Dra. Mirta Ucelay luego de las exposiciones de las partes y atento a los fundamentos expuestos, resolvió formular cargos por el delito de hurto simple en grado de tentativa previsto y penado en el art. 162,42 y 45 del Código Penal.

Para su resolución tuvo en consideración los antecedentes penales, la prueba pendiente a recepcionar y ordenó el traslado al Servicio Penitenciario.

El hecho ocurrió el pasado 1 de septiembre en la madrugada. En ese momento personal de la División de Rápida Intervención Motorizada (DRIM) en un recorrido advirtió a una persona con la mitad del cuerpo por la ventanilla dentro de un auto. Al mando de voz, el hombre se dio a la fuga con dos bultos en su poder, luego de unas cuadras se desapodera de los bultos y después es aprehendido. Dichos bultos eran dos camperas que pertenecian al dueño del mencionado auto estacionado en el domicilio del damnificado.

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